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Según los primeros indicios, el hijo, de 58 años, disparó a su madre y después se quitó la vida
Los casi mil habitantes de Casas de Benítez (Cuenca) no aciertan a entender qué le pudo pasar por la cabeza a Juan, un vecino de esta localidad de 58 años, para disparar a su madre, Julia, de 89 años, con una escopeta y después quitarse la vida.
El suceso ocurrió en la tarde de este sábado en el domicilio familiar de la calle Cuenca. La Guardia Civil halló los dos cadáveres en la casa y de nada sirvió que un médico de urgencias se desplazara hasta el lugar de los hechos ya que sólo pudo certificar ambas muertes.
La anciana y su hijo -albañil de profesión, casado y sin hijos- vivían juntos en esta vivienda, ubicada en una casa de una sola planta y, según los vecinos de este pueblo situado al sur de la provincia de Cuenca, nunca habían protagonizado sucesos violentos y aparentemente mantenían una buena relación.
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